Implementar acciones y medidas de nivelación e inclusión, para garantizar a toda persona la igualdad real de oportunidades y el derecho a la no discriminación, eliminando prejuicios y prácticas consuetudinarias que estén basados en la idea de la inferioridad o superioridad de cualquiera de los sexos o en funciones estereotipadas de hombres y mujeres, privilegiando los derechos de los niños y las familias.